El plurilingüismo solo es bueno para el plurilingüismo

En educación se hacen las cosas mal, porque la gente habla de ciertos temas desde su opinión y desde su perspectiva ideológica y no desde la evidencia científica, que es desde donde hay que partir. Ningún estudio ha demostrado que el plurilingüismo sea bueno para la adquisición de alguna competencia que no sea la de ser plurilingüe. Es decir la cuestión a poner encima de la mesa sería: ¿en la Comunidad Valenciana los estudiantes necesitan mejorar su competencia para usar varias lenguas, por encima de cualquier otra cosa?

Si nos fijamos en los resultados en la asignatura de lengua castellana en selectividad, las regiones con dos lenguas oficiales obtienen peores resultados que las regiones con solo una. En los centros piloto de Madrid, con alumnado seleccionado, es decir, de buena clase social y buenos expedientes académicos, los que estudian la opción bilingüe pura (con más horas de inglés y menos asignaturas en castellano) obtienen peores notas medias que los que estudian la opción bilingüe más «suave» (con alguna asignatura más en castellano). Es decir, el plurilingüismo no hace que mejore la adquisición de otras competencias, más bien al revés, cosa que, por cierto, hace luego que el expediente académico sea peor y no es esa una cuestión baladí, pues sirve para que luego cada alumno puede optar a los estudios que prefiere con mayores posibilidades de lograr la admisión.

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La Comunidad Valenciana es una de las campeonas en fracaso escolar y abandono de los estudios. ¿Lo que hace falta en nuestro territorio es potenciar el dominio de muchas lenguas, o potenciar otras competencias y reforzar las que no se adquieren correctamente y prevenir el abandono y fracaso escolar? Se afirma que saber idiomas es imprescindible para obtener un empleo en el futuro. ¿Es más importante que tener una carrera o una formación profesional que te capacite para ejercer una profesión? ¿Quién obtendrá trabajo antes y con mejores condiciones, un médico, o un abogado, o un informático con un B1 en inglés, o una persona con el graduado escolar pero bilingüe? Un farmacéutico, un arquitecto, un ingeniero… Pueden aprender un nivel medio de cualquier lengua en un año o dos. Nadie bilingüe sin estudios puede aprobar medicina, arquitectura o ingeniería en un años, o dos, o tres. Potenciar el plurilingüismo es, pues una opción política, no avalada por ninguna evidencia científica y si refutada por la experiencia y evidencias más actuales. Pretender que todos los alumnos de un territorio que tiene dos lenguas oficiales alcancen un nivel de competencia similar en las dos lenguas es un requisito que no atiende a razones pedagógicas, que es imposible y que va en contra del derecho reconocido en la Constitución Española de usar la lengua propia.

Cada alumno debería cursar su educación en la lengua que elija en aquellos territorios donde hay dos oficiales, con la obligación de estudiar la otra cooficial para tener un conocimiento de la misma, que no debe ser el centro de la escolaridad y el objetivo final de la educación. Pretender el dominio al mismo nivel de ambas solo es posible si se cursa la educación en la lengua que no es la materna, cosa que es antipedagógica, anticonstitucional y va en contra de las recomendaciones de la UNESCO. Si a un alumno que en la Comunidad Valencia que habla en valenciano se le obligara a estudiar en castellano nos parecería una barbaridad y un atropello a sus derechos. Si lo hacemos al revés, también lo es. Los habitantes de una región bilingüe tienen el derecho de usar la lengua minoritaria, no la obligación. Actuar así es imitar las actuaciones de quienes impusieron otras lenguas y es insistir en errores que no llevan a ningún lado. Cuando una lengua se introduce por real decreto y con la obligación de alcanzar un nivel tan alto como el que se tiene de la materna, lo único que se consigue es el rechazo de quienes no la hablan y usan otra, que se ven en la misma tesitura que quienes, hace ya muchísimos años, fueron obligados a dejar de hablar en su lengua y, de este modo, se reproducen actuaciones que no fueron correctas, ni justas. Las lenguas minoritarias hay que fomentarlas. Perdurarán si conseguimos que la gente quiera conservarlas, no si hacemos su uso obligatorio y a costa de que, quienes usan otra, el castellano, no pueden usarla para ejercer el derecho que tienen a recibir la educación en su lengua materna.

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